¿Cuáles son los síntomas de un manguito rotador desgarrado? Los doctores explican cómo tratarlo
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El dolor, la debilidad y un rango de movimiento limitado del hombro pueden ser síntomas de un manguito rotador desgarrado. Te contamos lo que debes saber sobre esta lesión y cómo se puede tratar.
Imagina esto: has estado trabajando mucho en la parte de natación de tu próximo triatlón. En las últimas semanas, has estado sintiendo una punzada en el hombro que te obliga a disminuir la velocidad o incluso a frenar por completo. ¿Qué está pasando? Es posible que el problema sea un desgarro del manguito rotador.
Según el Hospital for Special Surgery (ubicado en la ciudad de Nueva York), los desgarros de manguitos rotadores afectan anualmente a entre dos y cuatro millones de personas en los EE. UU. Pero ¿qué significa exactamente tener un manguito rotador desgarrado? Y, si tienes síntomas, ¿tienes que someterte a una cirugía?
Aquí te contamos todo lo que necesitas saber sobre los síntomas de un manguito rotador desgarrado y qué hacer para ayudar a sanar la lesión.
¿Qué es exactamente el manguito rotador?
El manguito rotador es una de las partes más importantes del hombro, ya que es responsable de mantener la articulación en su lugar.
"El manguito rotador es un grupo de músculos que unen el húmero con la escápula en la articulación glenohumeral", explica Cameron Yuen, P.T., C.S.C.S. y fisioterapeuta en Bespoke Treatments. "La articulación glenohumeral es una articulación que se compone de una cabeza y una cavidad y permite la movilidad en múltiples planos de movimiento".
Este tipo de movilidad, en todos los planos de movimiento, requiere que el hombro en sí esté lo suficientemente estable. "El manguito rotador proporciona esta estabilidad a través de la cocontracción, que es cuando todos los músculos del manguito rotador se contraen simultáneamente", dice Yuen.
De hecho, hay cuatro músculos que componen el manguito rotador. "Puedes recordarlos por el acrónimo SIRS: subescapular, infraespinoso, redondo menor y supraespino", dice Yuen.
Individualmente, los músculos del manguito rotador ayudan a rotar el brazo hacia adentro y hacia afuera y contribuyen a realizar movimientos funcionales como levantar los brazos por encima de la cabeza o llevarlos detrás de la espalda, explica Yuen. "Cada músculo tira del hombro en diferentes grados de rotación o, en movimientos de cocontracción, lo empuja hacia la articulación", dice.
¿Son comunes las lesiones del manguito rotador?
Debido a que el manguito rotador es responsable de la estabilidad en el hombro, se usa en casi todos los movimientos del brazo. Eso significa que trabaja mucho todo el tiempo, lo que lo hace más susceptible a las lesiones. Esto ocurre, en particular, con los deportes y las actividades que implican movimientos repetitivos o movimientos aéreos, como en el béisbol, la natación, el tenis, el remo y el levantamiento de pesas.
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"Las lesiones del manguito rotador son comunes en todas las edades, pero más comunes en personas mayores de 60 años", dice Jordan Metzl, M.D., médico de medicina deportiva del Hospital for Special Surgery. "Eso se debe a que el colágeno que constituye el tendón se deteriora con el tiempo, lo que hace que los tendones sean más susceptibles a las lesiones".
Hay dos tipos de lesiones que puede sufrir el manguito rotador: por traumatismo grave y por uso repetitivo.
"Las lesiones del manguito rotador por traumatismo grave ocurren por una caída, generalmente con la mano extendida, como un resbalón en el hielo o una caída de una patineta", dice Metzl. "Más comúnmente, las lesiones del manguito rotador ocurren gradualmente debido a una presión y tensión constantes en los músculos y los tendones a lo largo del tiempo". Esto se considera una lesión por uso repetitivo o excesivo.
"El desuso y la mala salud del tejido y el flujo sanguíneo en individuos mayores de 50 años también pueden ser una causa de desgarro del manguito rotador", agrega Yuen.
Además, puedes tener un desgarro parcial o un desgarro completo del manguito rotador, dependiendo de la gravedad de la lesión. "En general, los desgarros completos están asociados con una mayor debilidad, pero se debe hacer una resonancia magnética para conocer el panorama general", dice Metzl.
Síntomas de un manguito rotador desgarrado
Estas son algunas señales de que podrías tener un desgarro del manguito rotador, completo o parcial. Y recuerda, siempre es mejor consultar con un médico o un profesional de la salud con licencia para obtener un diagnóstico preciso.
- Sientes un dolor profundo e intenso.
Con cualquier lesión, es esperable que sientas dolor. Cuando se trata del manguito rotador, no es diferente. "Es probable que sientas dolor en el hombro y la parte superior del brazo," particularmente de noche y cuando intentes levantar los brazos por encima de la cabeza", dice Metzl. Es probable que el dolor también se sienta dentro del cuerpo. "A menudo, se describe como un dolor de muelas en el hombro", agrega.
- Tienes problemas para levantar los brazos por encima de la cabeza.
Es posible que comiences a notar que no solo sientes dolor al levantar los brazos, sino que es posible que no puedas hacerlo en absoluto. Cuando esta lesión está presente, "es normal sentir una sensación de debilidad al levantar los brazos o tener dificultades para hacer actividades generales como levantar pesas", dice Metzl.
- Tu rango de movimiento es limitado.
Junto con una lesión en el manguito rotador vienen restricciones que se relacionan con el movimiento del brazo. "El dolor o la incapacidad de llevar el brazo hacia la espalda o de rotarlo hacia adentro o hacia afuera son signos de un posible desgarro del manguito rotador", dice Yuen.
- Estás perdiendo masa muscular.
Si comienzas a notar que, junto con la sensación de incomodidad, también estás perdiendo masa muscular, esto podría ser un signo de un desgarro del manguito rotador. "Puedes tener una atrofia muscular en la parte superior del hombro o en la parte posterior del omóplato", dice Yuen.
Cómo curar un manguito rotador desgarrado
Si crees que puedes haberte dañado el manguito rotador, el primer paso es ver a un médico. "Hazte un examen, una radiografía y posiblemente una resonancia magnética para obtener un diagnóstico completo y adecuado", dice Metzl. Una vez que sepas cuál es el problema con el hombro, puedes determinar qué hacer.
Dependiendo de la edad, la causa, la gravedad y el daño a cualquier otra estructura del hombro, una cirugía puede ser necesaria para restaurar la función completa del hombro.
"Esto es para cuando hay una ruptura completa del músculo o, más comúnmente, cuando el músculo se convierte en tendón", explica Yuen. Pero una cirugía del manguito rotador no debe tomarse a la ligera.
"La recuperación de una cirugía de manguito rotador puede llevar entre seis meses y un año, idealmente acompañada con ejercicios", dice Yuen.
Afortunadamente, no todas las lesiones del manguito rotador necesitan cirugía. "De hecho, la mayoría no la necesita", afirma Metzl. "Es recomendable probar otros enfoques primero".
Si estás considerando evitar una cirugía o tu lesión no lo requiere, el siguiente paso sería ver a un fisioterapeuta, idealmente uno que se especialice en ortopedia o medicina deportiva. Debido a que el manguito rotador no funciona por sí solo, sino que funciona para estabilizar el hombro a medida que otros músculos producen movimiento, la progresión en la rehabilitación incluirá ejercicios que primero fortalezcan el manguito rotador e involucren el manguito rotador en movimientos más funcionales, agrega Yuen.
"El fisioterapeuta prescribirá ejercicios de movilidad y fortalecimiento para restaurar tu función mientras reacondiciona tus debilidades", explica. "Las prioridades son reducir el dolor disminuyendo la inflamación y aumentando el flujo sanguíneo, restaurar la movilidad completa del hombro y luego fortalecer los músculos del manguito rotador, así como los músculos más grandes del hombro y la escápula".
Seguir el plan de tratamiento de un terapeuta puede ayudarte a recuperar la fuerza y la estabilidad en el hombro, y continuar haciendo los ejercicios puede evitar que sufras otra lesión en el manguito rotador en el futuro.
Texto: Amy Schlinger, NASM-C.P.T.