Todo lo que los expertos quieren que sepas sobre la tríada de la atleta
Salud y bienestar
Este síndrome engañoso afecta a atletas de todas las edades y capacidades. Por suerte, este síndrome se puede tratar a través de un enfoque multidisciplinar.

Para las atletas de todas las edades y niveles de condición física, se ha demostrado que la participación en deportes y ejercicio ofrece una gran cantidad de beneficios, como una mejor autoestima y un cuerpo más fuerte y saludable. Pero para algunas atletas, puede ocurrir que se priorice el ejercicio sobre la recuperación y nutrición adecuadas, lo que resulta en una condición relativamente común: la tríada de la atleta.
Explicación sobre la tríada de la atleta
Según un artículo del año 2000 en American Family Physician, la tríada de la atleta consiste en tres componentes:
- Desorden alimenticio. Sin una amplia nutrición para alimentar y mantener en estado al cuerpo, la atleta puede fatigarse o no rendir tan bien como debería, dice Bridget J. Quinn, médica deportiva en el Programa de Atletas Femeninas del Boston Children's Hospital y jefa médica asesora del Boston Ballet.
- Períodos irregulares. La mala nutrición, la ingesta baja en calorías y las altas demandas de energía del ejercicio pueden causar períodos irregulares o provocar amenorrea, que es la pérdida del período. “Si tu ciclo menstrual se ve afectado, es un signo vital de que algo en el cuerpo no funciona de manera correcta”, afirma Quinn.
- Densidad mineral ósea baja. Si cesan los períodos, los cambios hormonales posteriores pueden interrumpir los procesos de formación de los huesos, lo que puede debilitar los huesos y causar osteoporosis (densidad mineral ósea baja) en casos graves.
La tríada es especialmente frecuente en los deportes de resistencia como el atletismo, la natación, la gimnasia, el patinaje artístico y el remo. Pero puede afectar a atletas de cualquier edad y capacidad, sostiene Quinn.
De acuerdo con "Female Athlete Series: Female Athlete Triad", publicado por Boston’s Children Hospital Sports Medicine, si no se trata, la tríada de atleta femenina puede presentar graves consecuencias como infertilidad, un mayor riesgo de enfermedad cardíaca y una mayor vulnerabilidad a las fracturas por sobrecarga.
La tríada de la atleta se encuentra relacionada con la deficiencia energética relativa en el deporte, o RED-S, un síndrome de problemas de salud y disminución del rendimiento deportivo debido a la falta de calorías suficientes para satisfacer las demandas energéticas del entrenamiento, según el Boston Children’s Hospital.
¿Cómo se diagnostica la tríada de la atleta?

Ya que los síntomas son parte de un espectro, la tríada de la atleta puede ser difícil de diagnosticar. Por un lado, las tres condiciones pueden tener altibajos. Por ejemplo, el ejercicio excesivo puede presentarse como síntoma principal, mientras esa persona continúa menstruando.
Y al contrario, a pesar de que una atleta lo programe correctamente, su período puede perderse debido a la baja ingesta calórica. “No es necesariamente un escenario u otro”, dice Quinn.
Para recibir un diagnóstico y pensar en un posible tratamiento, es crucial visitar a un médico o un profesional médico con licencia. Quinn opina que se considerarán los factores clave durante estas revisiones iniciales para dar como resultado un diagnóstico como:
- Perder varios períodos seguidos
- Sufrir una fractura ósea por sobrecarga en el deporte
- Creer que podrías tener un desorden alimenticio
Sin embago, Quinn anima a las atletas a pensar fuera de estos factores. “La baja disponibilidad de energía afecta a muchos sistemas del cuerpo”, sostiene. La tríada puede también aparecer como:
- Problemas gastrointestinales (GI) frecuentes, como hinchazón y estreñimiento
- Fatiga crónica
- Lesiones persistentes
En pocas palabras: si las cosas se sienten "fuera de lugar", consulta a tu médico de confianza.
Prepárate para presentar un historial médico completo. La Academia Estadounidense de Cirujanos Ortopédicos recomienda revisar lo que comes, cualquier variación en tu peso, si has perdido algún período y tu historial de lesiones.
Tu médico te pedirá un examen físico que puede incluir controlar altura y peso, presión arterial, vista, corazón y pulmones, y examinar músculos, huesos y articulaciones. Pueden también usar pruebas de laboratorio para verificar el embarazo, la enfermedad de tiroides y otras afecciones médicas, y así descartar otras posibles causas de tus síntomas. Y si los síntomas y el historial médico sugieren huesos debilitados, el médico puede recomendar una prueba de densidad ósea. Esto brindará a la atleta información para entrenar y recuperarte de la mejor manera posible para tu cuerpo, al tiempo que reduce el riesgo de fracturas por sobrecarga y otras lesiones comúnmente relacionadas.
¿Cómo se trata la tríada de la atleta?

Si obtienes un diagnóstico de tríada, el médico puede derivarte a un equipo de especialistas para recibir tratamiento. “Es un enfoque interdisciplinario”, afirma Michelle T. Barrack, Ph.D., dietista registrada y especialista certificada en dietas deportivas y F.A.C.S.M., y presidenta de la Coalición de la Tríada de Atletas Femeninos y Masculinos.
Dependiendo de los síntomas y problemas de salud, estos especialistas pueden incluir un dietista deportivo, terapeuta o psicólogo, y un ginecólogo o endocrinólogo.
El objetivo principal del tratamiento es mejorar la nutrición para desarrollar un peso corporal saludable, reponer energía y restaurar el ciclo menstrual.
Si el atleta también recibe un diagnóstico de trastorno alimenticio, es esencial trabajar con un médico de salud mental y un dietista registrado en lo posible.
Conclusión

La tríada de la atleta es un síndrome engañoso, afirma Quinn. Presta atención a las señales de advertencia y comunícate con un médico u otro profesional médico autorizado para obtener ayuda antes de que sea tarde. “Cuanto antes comiences el tratamiento, más fácil será optimizar la energía y la nutrición y prevenir las consecuencias a largo plazo, especialmente para la salud ósea”, aconseja Barrack.
Texto: Lauren Bedosky