New Wins: Eliud Kipchoge

Atletas*

Su histórico maratón de 1:59:40 fue solo el comienzo. Ahora, Eliud Kipchoge usa sus logros sobrehumanos para inspirar a la gente de todo el mundo a que reconsidere su propio potencial.

Última actualización: 2 de septiembre de 2021
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Siempre duerme en la litera de arriba en el campamento de entrenamiento; le encanta la música de Kelly Clarkson, y está iniciando un movimiento mundial que va más allá del deporte. Eliud Kipchoge alcanzó el estatus de leyenda el día en que rompió la mítica barrera del maratón de dos horas. Ahora, quienes lo conocen nos comparten una imagen íntima de la leyenda que está redefiniendo el éxito.

Un héroe humilde

Cuando Gloria Kosgei, una abogada de Eldoret, Kenia, la ciudad de Eliud Kipchoge, conoció al legendario maratonista, él hizo algo que la sorprendió: se presentó a sí mismo.

"Cuando nos conocimos, fue muy amigable. Dijo: 'Gloria, me llamo Eliud'. Como si necesitara presentación.¿Quién no conoce a Eliud?", dijo, riéndose.

Gloria, quien ahora es una buena amiga de Kipchoge, aprecia la naturaleza modesta del corredor, un rasgo que le ha ganado la adoración y el respeto de su país natal y del mundo.

"Todos hablan de su humildad", dice Gloria. "En Kenia tenemos muchos grandes atletas, pero un atleta de su talla con una humildad como la suya es un hallazgo raro. Él no busca recibir un trato especial; espera en la fila como el resto de nosotros. Eliud es un atleta de alto perfil, pero él no se ve a sí mismo de esa manera. Te dice, 'Soy Eliud. Nada más'".

Eliud es un atleta de alto perfil, pero él no se ve a sí mismo de esa manera. Te dice, "Soy Eliud. Nada más".

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El abogado de toda la vida de Kipchoge, Richard Cheruiyot, lo conoce desde hace más tiempo que la mayoría. Richard, vecino también de Eldoret, es muy cercano a Eliud desde hace más de 20 años, y dice que, aún a pesar del éxito de Kipchoge, su actitud —al igual que sus hábitos de sueño— sigue siendo la misma.

"Al principio, cuando era un desconocido, Eliud solía ir al campamento de atletismo en Kaptagat, Kenia. Ahora, aunque se ha convertido en campeón mundial, sigue visitando el campamento y duerme en la cama superior de una litera. No tiene ningún problema con ello", dice Richard de su cliente y amigo con tono asombrado.

"Cuando está fuera del campamento, suele convertirse en una suerte de magneto a causa de su popularidad. La gente se le acerca y le hace preguntas o le pide que pose para selfies, y nunca lo he visto rechazar a nadie".

La constancia es la clave

Kipchoge es la personificación de un rasgo que inspira a quienes lo conocen: una disciplina inquebrantable. Emilie Mullier Charrier, una agente de bienes raíces radicada en Berlín y maratonista que lo conoció en el maratón de Berlín en 2018, dice que, luego de conocer a Kipchoge, se sintió inspirada a entrenar más en serio, razón que la llevó a reducir su tiempo de maratón en una hora. Pero los beneficios de esa mentalidad se han extendido más allá de su entrenamiento.

"Eliud ha influido mucho en mí", dice ella. "Cuando observas su disciplina, su constancia y dedicación al running, te dan deseos de hacer lo mismo. También aplico lo que él hace con el running en mi vida personal. Siempre tengo un plan, un programa, y me esfuerzo al máximo cada día, incluso si no soy buena. Siempre quiero esforzarme y ser mejor que ayer, como él".

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Otra discípula de Kipchoge es Usila Koech, una ejecutiva de préstamos radicada en Las Vegas. La familia de Usila tiene una amistad estrecha con el coach de Kipchoge, Patrick Sang, desde hace más de 30 años. Sus dos hijos son corredores y, al igual que Emilie, han adoptado la ética de trabajo de Kipchoge.

"En 2019, toda nuestra familia visitó Kenia y le pedimos reunirnos con él, aunque sabíamos que estaba preparándose para su intento de correr un maratón en Vienna en menos de dos horas. Él llegó puntual y nos dio toda su atención. Abrazó a los chicos y les regaló una gran sonrisa y un abrazo cálido. Nos contó su historia, preguntó a los chicos con genuino interés cuáles eran sus sueños y les dijo: 'Ustedes pueden lograr todo lo que quieran. Solo deben ser disciplinados. Deben ser constantes. Deben trabajar duro'".

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Nos contó su historia, preguntó a los chicos con genuino interés cuáles eran sus sueños y les dijo, "Ustedes pueden lograr todo lo que quieran. Solo deben ser disciplinados. Deben ser constantes".

La familia Koech se tomó una foto con Kipchoge ese día. Meses después, ellos estaban entre la multitud cuando Kipchoge corrió su histórico maratón en Viena. La experiencia y las conversaciones que tuvieron con Kipchoge antes de la carrera dejaron una profunda huella en los hijos de Usila.

"Conocer a Eliud cambió la manera en que ven el mundo en general", dice Usila. "Tenemos una broma entre nosotros. La mayoría dice: '¿Qué haría Jesús?', pero nosotros decimos: '¿Qué haría Eliud?'. Pensamos de este modo porque uno no se hace grande haciendo cosas mediocres. Solo te haces grande siendo muy, muy disciplinado y siendo constante".

Encendiendo la chispa de la inspiración

La visión de Kipchoge del éxito es inspiradora porque hace que cualquier meta parezca alcanzable. Madhvi Dalal, una farmacéutica de origen galés y fundadora de una organización benéfica en Nairobi que busca combatir la pobreza menstrual, fue testigo de la magia de Kipchoge en persona cuando este trabajó como voluntario con ella en el condado de Samburu, en Kenia.

"Los matrimonios infantiles y los embarazos juveniles son comunes en esta parte del país", dice Madhvi. "Yo enseño a las chicas acerca de salud menstrual y derechos sexuales, pero Kipchoge les enseñó mucho más. Les dijo: 'La vitamina N es el derecho a decir no. Y esa es más importante que cualquier otra vitamina. Ustedes tienen el derecho a decir no'. También dijo: 'Un libro es su mejor amigo'. Y muchas chicas lo escucharon. Dos meses después, cuando les preguntaron '¿Qué quieres ser cuando seas mayor?', ellas dijeron que querían ser ingenieras, pilotos, etcétera. Él les dio esperanza".

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Mientras Kipchoge inspiró a las hijas de Madvhi a soñar con sus futuras carreras, Elijah "Eljay" Mutua, un artista del grafiti de Nairobi, dice que el corredor es una influencia que constantemente impulsa su arte.

"Kipchoge me ha inspirado a creer que puedes ser imparable", dice Eljay. "La más grande lección que aprendí de él fue siempre ser honesto conmigo mismo. Tu trabajo siempre refleja tu identidad. Es como una firma. Cuando te encuentras a ti mismo, encuentras la clave para todo lo demás".

"Kipchoge me ha inspirado a creer que puedes ser imparable".

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El verdadero legado

Desde Eldoret hasta Las Vegas, Eliud usa su don no solo para romper récords, sino también para inspirar y empoderar a los demás a que busquen su motivación. Ya sea una meta personal, un nuevo objetivo o un mejor futuro, Kipchoge ha cambiado las vidas de estas personas y les ha ayudado a superar sus propios obstáculos y a alcanzar sus propias metas.

Esta comunidad mundial de creyentes en su propia capacidad de superar los límites es el verdadero legado de Kipchoge; uno que perdurará más allá de sus medallas de oro, su velocidad sobrehumana y sus momentos de gloria en el podio. Casi al final de nuestra entrevista, Usila Koech —la mujer cuya familia vive bajo el lema "¿Qué haría Eliud?"— resume la esencia de ese legado.

"Creo que su misión —de verdad lo creo de corazón— es dejar un mundo mucho mejor que el que encontró".

Muralista: Elijah "Eljay" Mutua Fotógrafos: Kyle Weeks y Chris Anderson

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Publicado originalmente: 12 de agosto de 2021