9 ventajas del Hot Yoga para conseguir un cuerpo y una mente más sanos
Salud y bienestar
El Hot Yoga se practica en un ambiente similar al de una sauna y sirve para relajarte mientras haces un entrenamiento intenso, y mejoras la fuerza y la flexibilidad.
El yoga relaja la mente, se centra en la respiración y la combina con los movimientos al realizar distintas posturas. Algunas clases de yoga se hacen en un estudio a altas temperaturas para que el entrenamiento sea incluso más intenso.
Las salas con temperaturas altas crean un ambiente similar al de las saunas. Esto te hace centrarte en el presente y te ayuda a desconectar y relajarte. El yoga con calor hace que los pulmones y el corazón trabajen más y, como en las sesiones sin calor, esta práctica te ayuda a mejorar la fuerza y la flexibilidad.
Hot Yoga o bikram yoga
Es posible que hayas oído que el Hot Yoga y el bikram yoga son lo mismo, pero en realidad tienen sus diferencias. El bikram es un tipo de yoga que consiste en 26 posturas que se repiten durante toda la clase y dura unos 90 minutos más o menos. La sala se calienta a unos 40 grados y, normalmente, las clases son más silenciosas, sin música ni cantos.
El Hot Yoga es más bien un término genérico para referirse a que la habitación se calienta hasta llegar a una temperatura de entre 26 y 38 grados. También puede incluir diferentes posturas, según el estudio y el instructor. Además, a diferencia del bikram, el Hot Yoga suele practicarse con música.
El calor de este tipo de yoga hace que la sesión sea más exigente, pero ofrece beneficios para la salud, tanto mental como física.
Ventajas del Hot Yoga
1.Mejora la flexibilidad
Estirar cuando los músculos se han calentado (como se hace en el Hot Yoga) aumenta la flexibilidad y mejora la amplitud de movimiento de las articulaciones. Un estudio de marzo de 2013 del Journal of Strength and Conditioning Research demostró que, tras 8 semanas, las personas que practicaron bikram yoga tenían más flexibilidad en los hombros, la zona lumbar y los isquiotibiales que el grupo de control.
La flexibilidad ayuda a adoptar determinadas posturas de yoga con más facilidad, sobre todo las que requieren un estiramiento profundo. Además, el yoga fortalece los músculos. El mismo estudio demostró que los participantes podían levantar más en peso muerto.
2.Aumenta la capacidad pulmonar
Como el yoga se centra en técnicas de respiración y te enseña a concentrarte al inspirar y espirar, entrena los pulmones para retener más aire. Respirar hondo habitualmente permite que entre más oxígeno en el flujo sanguíneo, mantiene los pulmones sanos y aumenta la capacidad pulmonar, que suele disminuir con la edad.
El pranayama es un tipo de ejercicios de yoga concreto que se centran en controlar la respiración durante un periodo de tiempo determinado. En él, se trabaja la respiración abdominal, la torácica y la clavicular, lo que te ayuda a maximizar la entrada de oxígeno.
3.Mejora la densidad ósea
La densidad ósea disminuye con la edad. Por ejemplo, con la menopausia se reduce hasta un 50 % la densidad ósea, y aproximadamente la mitad de este porcentaje se pierde en los primeros 10 años.
En un período de 5 años, la densidad ósea de las personas con perimenopausia que practicaban bikram yoga aumentó en la pelvis, la zona lumbar y el cuello, según un estudio de mayo de 2014 de la Scientific Research. El estudio llegó a la conclusión de que los entornos con temperaturas altas reducen los efectos de la osteoporosis en las mujeres mejorando la circulación, la respiración y la sudoración.
4.Quema calorías
En una clase de yoga normal se pueden quemar entre 180 y 460 calorías en función de la intensidad y la duración de la sesión y el peso.
Una investigación de la Colorado State University demostró que las personas que practicaban hot yoga eran de las que más calorías quemaban: las mujeres unas 330 calorías en una clase de 90 minutos y los hombres unas 460 (porque normalmente pesan más).
En un estudio con la temperatura alta se suda mucho más, así que el cuerpo debe trabajar más para regular la temperatura y el corazón tiene que bombear más sangre. Esto significa que con el Hot Yoga se queman más calorías que en una clase de yoga tradicional sin calor.
5.Ayuda a disminuir los síntomas de la depresión
Tanto el yoga como la meditación pueden contribuir a reducir los síntomas de la depresión, como indica la American Psychological Association.
Los veteranos que sufrían depresión notaron una mejoría general en su estado de ánimo y su enfermedad después de hacer yoga durante seis semanas, de acuerdo con un estudio de mayo-junio de 2018 de Military Medicine. Practicaron yoga, trabajaron la respiración y meditaron una vez por semana durante 60 minutos.
Según un estudio de agosto de 2019 del Journal of Alternative and Complementary and Medicine, un curso de ocho semanas de bikram yoga redujo los síntomas de la depresión en mujeres de mediana edad, incluidos la autocrítica, el pesimismo, la mala calidad de vida y el deterioro cognitivo.
6.Regula los niveles de glucosa en sangre
Las personas con diabetes tipo 2 pueden beneficiarse del yoga, porque ayuda a controlar los niveles de azúcar en sangre, de acuerdo con un estudio de octubre de 2013 del Journal of Bodywork and Movement Therapies. Las investigaciones demuestran que incluso en un periodo corto de tiempo (8 semanas), la rutina de bikram yoga mejoró la tolerancia a la glucosa en adultos que tendían a la obesidad.
7.Ayuda a gestionar el estrés
El yoga te anima a centrarte en tu interior y a darte cuenta de los factores externos que te estresan. Si practicas esta disciplina de forma regular, empezarás a entender cómo las técnicas de respiración, la tranquilidad y el calor de la sala pueden ayudar a tu cuerpo y a tu mente a relajarse.
En un estudio de abril de 2017 del Journal of Mental Health, un programa de 16 semanas de Hot Yoga con adultos sedentarios físicamente mejoró su estado de ánimo y redujo los niveles de estrés después de una sola sesión de 90 minutos.
8.Mejora la salud del corazón
Entrenar en una sala a una temperatura elevada es, sin duda, todo un reto físico. El corazón, los pulmones y los músculos trabajan más y, por tanto, aumenta la respiración, la frecuencia cardiaca y el metabolismo.
Un estudio de abril de 2019 del Journal of Alternative and Complementary Medicine demostró que una sesión de Hot Yoga acelera la frecuencia cardíaca a un ritmo similar al de caminar a paso ligero (5,6 km/h).
9.Mejora la salud de la piel
Sudar más mejora la circulación y hace que haya más sangre rica en oxígeno en las células de la piel. Por eso estás tan brillante después del yoga.
El sudor del ejercicio puede incluso revertir los signos de la edad en las células. Lo bueno de esto es que la piel puede producir más colágeno, hidratarse mejor y estar más tersa.
Consejos de seguridad para el Hot Yoga
Como en cualquier entrenamiento, hay que saber cómo mantener la seguridad y evitar las lesiones. El Hot Yoga puede resultar demasiado intenso o sofocante si estás empezando. Por eso, es importante llevar un ritmo tranquilo y tener claro qué es lo normal y qué hay que hacer si sientes demasiado calor o agobio. Aquí te dejamos unos cuantos consejos:
- Mantén la hidratación: bebe agua antes, durante y después de la clase.
- Escucha a tu cuerpo: siempre puedes salir de la clase para tomar el aire y refrescarte. Tu instructor de yoga quiere que te sientas con seguridad y fuerza, así que es recomendable hacer un descanso fuera de la sala si lo necesitas.
- Consulta con tu médico si has sufrido alguna enfermedad: si cuentas con un historial de desmayos por tener la presión arterial baja o si sufres problemas del corazón, no te olvides de hablar con un profesional antes. Esto también incluye a las personas embarazadas.
Cómo iniciarse en el Hot Yoga
Si te interesa este tipo de yoga, prueba primero una clase normal. Pregunta también en el estudio si tienen clases de Hot Yoga para principiantes.
Algunas se practican con el calor residual de la sesión anterior, así que la temperatura es más baja que en una clase de Hot Yoga normal, pero suele estar entre los 26 y 29 grados.
Lo más importante es probarlo para saber si te gusta el Hot Yoga o si prefieres quedarte con las clases sin calor.