¿Cuál es la mejor forma de medir cuánto he corrido?

Evidentemente, hay personas que corren por diversión, sin mirar el reloj ni cuántos kilómetros están recorriendo. Pero para muchos runners, los kilómetros importan. Saber cuántos kilómetros corres puede ayudarte a fijarte objetivos de distancia, ya sea para mantenerte en forma, entrenar para una carrera, utilizar esta información para complementar una rutina de pérdida de peso, saber cuando debes renovar tus zapatillas de running o, simplemente, sentirte bien por un logro.

A pesar de que no hay una distancia media establecida en la que basarte, las investigaciones demuestran que correr unas 4 horas y media a la semana a una velocidad moderada de unos 9 km y medio o de 6 minutos y medio por cada km es una de las mejores formas de aprovechar al máximo los beneficios del running.

Dicho esto, ¿hasta dónde puedes llegar?

Los accesorios de dispositivos de seguimiento con GPS son herramientas útiles que te proporcionan muchos datos solo con llevarlos puestos. Y no solo eso, sino que muchas opciones son tan sofisticadas que te permiten fijarte objetivos de fitness y bienestar que el running te puede ayudar a conseguir. Puedes registrar tus estadísticas de fitness a lo largo del tiempo para ver tu progreso y poder establecer conexiones directas entre tu actividad física (ya sea andar, running, etc.) y tu salud.

Algunos dispositivos de seguimiento con GPS se integran con aplicaciones de fitness que pueden ayudarte a cumplir tus objetivos con la ayuda de un entrenador virtual. Tendrás acceso a consejos para tu programa personal de running y el apoyo de un "compañero" virtual que te animará a cada kilómetro.

Por ejemplo, el Apple Watch Nike tiene todo lo que necesitas y más. Con este dispositivo, no solo puedes utilizar todas las funciones de un Apple Watch, sino que también tienes acceso a la Nike Run Club App desde el reloj (además, si lo prefieres, puedes descargar NRC App en tu móvil). La Nike Run Club App te permite realizar un seguimiento de tus entrenamientos y escuchar guías de running por audio para disfrutar de las sabias y motivadoras palabras de un entrenador mientras corres. Como ventaja adicional, el Apple Watch Nike te permite escoger esferas exclusivas de Nike y correas Nike Sport.

Mientras te animan a descubrir la conexión entre distancia, frecuencia cardiaca, ritmo y otros factores, los dispositivos de seguimiento para fitness ayudan a hacerte una idea general del impacto que tiene el running en la salud. Los dispositivos de seguimiento con GPS para fitness se ocupan de calcular y procesar todos los datos mientras te mueves. Tú solo tienes que acordarte de cargarlo y ponértelo antes de salir a correr.

Aunque ya estés usando una aplicación de fitness o un reloj para registrar lo que corres, una forma fácil de calcular la distancia es mediante un dispositivo de seguimiento de ruta. Las herramientas como Google Maps te permiten planear tu ruta con antelación, lo que te ayuda a cumplir objetivos de kilómetros específicos. También son útiles para evitar zonas por las que no quieres correr, ya sea por el terreno, el desnivel, el tráfico o cualquier otro factor que pueda dificultar tu ruta de running. Crea la ruta ideal para ti.

Otra ventaja de establecer rutas de running fijas con un mapa es que te permiten evitar un esfuerzo excesivo. Aunque te sientas genial cuando empieces a correr, seguramente querrás terminar justo donde empezaste. Planear una ruta de una distancia adecuada te asegura que no te quedarás sin fuerzas antes de llegar al final.

También puedes planear varias rutas con antelación. Esto te ayuda a modificar tus sesiones de running día a día sin sacrificar la distancia que quieres recorrer para poder crear un programa de entrenamiento adecuado para ti. Además, puedes incluir un poco de tiempo para caminar que te permita recuperarte al final de la sesión.

Para darle un enfoque más básico a tu registro de kilómetros recorridos cada día, lo único que necesitas son unos cálculos simples y un par de datos clave. Necesitarás saber (1) el tiempo total que corres y (2) tu ritmo.

No es fácil saber tu ritmo sin ayuda externa. Tienes que asegurarte de que estás corriendo una distancia específica antes de empezar. Aunque los terrenos irregulares pueden afectar a tu ritmo, marcar puntos de referencia en una superficie plana te ayudará a conseguir las cifras adecuadas para estos cálculos matemáticos.

Para marcar un punto de referencia de ritmo preciso, corre 1 kilómetro en una pista de 400 metros (la distancia estándar). 1 kilómetro equivale a dos vueltas y media. El tiempo que tardes en completar esta carrera de 1 km será la cifra de kilómetros aproximada que recorras por hora. Asegúrate de correr a un ritmo que consideres normal. No corras muy rápido durante todo el kilómetro porque no podrás mantener ese ritmo siempre que corras. El objetivo es establecer un ritmo realista que puedas mantener cada vez que salgas a correr. Por ejemplo, si corres 1 kilómetro en 6 minutos y medio, un tiempo que se acerca bastante a lo que se suele tardar de media, tu ritmo será de 9 km y medio por hora.

La fórmula es simple:

• Tiempo (en horas) x km/h = total en km

Por lo tanto, si corres las cuatro horas y media por semana que se recomiendan al ritmo de tu carrera de prueba, serían 4,5 x 9,5, de forma que correrás cerca de 43 km por semana.

Registrar los kilómetros que corres no solo te motivará a seguir adelante, sino que te ayudará a conocer tu progreso como runner. Cuanto más corras, más aumentará tu ritmo y más lejos querrás llegar. Aunque no corras mucho cada día, solo con hacer entre 5 y 10 minutos estarás mejorando tu salud. Correr contribuye a reducir el riesgo de ataques al corazón, infartos y otras enfermedades comunes.

Con todas las ventajas que te ofrece una buena sesión de running, quizá sea el momento de empezar a calcular los kilómetros, ¿no?